La nueva tarifa de la luz incrementa el precio más de un 4% y deja a siete millones de hogares fuera del mercado regulado
A partir del 1 de enero, encender una bombilla será un lujo. Ese día entra en vigor la orden ministerial de peajes eléctricos que establece un nuevo sistema de tarifas que, además de incrementar considerablemente el precio de la luz, “echa” del mercado regulado a siete millones de consumidores y los expone al mercado libre, en el que las compañías ofrecerán precios más caros. A partir de ahora la factura de la luz dependerá del nivel de consumo de cada hogar al mes, pero la progresividad será casi imposible de aplicar mientras la lectura de contadores sea cada dos meses.
26-12-2012
El recibo de la luz se divide en dos tramos. Un 50% de lo que se paga corresponde al consumo, y el precio del kilovatio por hora (kW/h) depende de la tarifa que tiene contratada cada consumidor, bien sea en el mercado libre o en el mercado regulado por el Gobierno (Tarifa de Último Recurso, TUR); la otra mitad de la factura se fija directamente por el Gobierno y corresponde a los peajes, o costes regulados, entre los que figuran las retribuciones al transporte, la distribución, las primas al régimen especial y otras partidas. La orden ministerial que entra en vigor en enero supone cambios tanto en la TUR como en los peajes que van a afectar a millones de consumidores.
Siete millones de consumidores expulsados del mercado regulado
La nueva Tarifa de Último Recurso (TUR) de electricidad que aplicará el Ministerio de Industria, Energía y Turismo para los consumidores domésticos establece como umbral para estar acogido al precio regulado tener contratada una potencia inferior a 5 kilovatios (kW).
Fuente gráficos: El País
Hasta ahora se podían acoger los consumidores con menos de 10 kW de potencia contratada. Con cambio de umbral quedan fuera alrededor de siete millones de consumidores, que tendrán un plazo de 6 meses para contratar con una compañía en el mercado libre, con tarifas que suelen ser iguales o más caras que las reguladas. El plazo es a todas luces insuficiente, teniendo en cuenta que en la anterior rebaja del umbral se dio un año para el cambio, y fueron necesarias varias prórrogas ante lo complejo del proceso.
Una tarifa progresiva que supone una subida de la luz
Además, a partir de comienzos de 2013, los consumidores con potencias contratadas entre 3 y 10 kilovatios –la mayoría de los hogares- y que sobrepasen en más de un 10% el consumo medio deberán hacer frente a recargos que podrían encarecer su recibo entre el 1 y el 8 %. La progresividad se aplicará a partir de los 3 kW de potencia, de modo que no afectará a los hogares acogidos al bono social. El primero tramo de tarifa va de 3 a 4 kW, el segundo de 4 a 5 kW, y así sucesivamente, hasta los 10 kW. Estos recargos oscilan entre los 0,00138 y los 0,01546 euros por kilovatio hora y se aplicarán sobre los peajes eléctricos, la parte del recibo de la luz que fija el Gobierno. La aplicación de esta tarifa progresiva se traducirá en una subida media del 4,3% para los consumidores.
La aplicación de esta progresividad va a suponer varios problemas. No será equitativa, ya que no tiene en cuenta cuántas personas viven en cada hogar ni su situación económica. Su puesta en marcha va a suponer un caos técnico, ya que implica que las compañías deberán cambiar sus sistemas informáticos para facturar. Además, la progresividad se refiere a las lecturas reales mensuales, no estimadas, cuando en la actualidad los contadores se leen cada dos meses.
¿TUR o mercado libre?
Hasta ahora, los precios en el mercado libre se regían por la TUR, de manera que casi todos, salvo algunas tarifas con planes especiales, eran iguales al precio del mercado regulado. Un hogar con un consumo doméstico moderado (una vivienda que dispone de cocina eléctrica y los electrodomésticos habituales), según datos de la Comisión Nacional de la Energía (CNE), tiene una potencia contratada de 3,3 kW y un consumo de 3.000 kW/h al año, por lo que seguirá pudiendo acogerse a la TUR. En diciembre de 2012, según la CNE, el importe anual de la TUR era de 647,36 euros.
Sin embargo, un hogar con aire acondicionado, bomba de calor o calefacción eléctrica, ya tiene un consumo intensivo, con una potencia contratada de 5,5 kW y 5.000 kW/h al año, y a partir de enero no se podrá acoger a la TUR. Según los datos de diciembre, el importe anual de la TUR para este consumo era de 1.078,93 euros. Al desaparecer esta referencia, las compañías eléctricas, sin la competencia del precio regulado, tendrán vía libre para los incrementos de las tarifas para estas potencias. Los organismos de competencia deberán estar aquí muy atentos para que el mercado funcione correctamente y las empresas fijen precios realmente competitivos.
La Comisión Nacional de la energía ofrece un útil Comparador de ofertas de energía que analiza las tarifas eléctricas de los diferentes operadores, según localidad y potencia y servicios contratados.
Incremento sin freno
El precio de la luz ha subido desde 2006 por encima de la inflación. Las eléctricas aducen el llamado déficit de tarifa, esto es, que gastan más en producir la luz que lo que cobran por ella. El Gobierno podía controlar en cierta manera el precio que ponían las compañías interviniendo en la subasta periódica de electricidad, donde se decide parte del precio de la luz. Pero el ministro de Industria, Energía y Turismo señaló que no intervendrá en próximas subastas, ya que se ensancharía el déficit. De esta manera, se prevé que el precio, sin control del Estado, siga subiendo durante 2013.